¿De dónde surge la idea del montaje?
El texto en el que nos basamos para hacer el montaje pertenece a Gracia Morales. Nuestro primer contacto con el texto fue hace un año aproximadamente, cuando buscaba alguna historia que pudiesen interpretar dos personajes. La primera vez que lo leí quedé enamorado de los personajes de Clara y Mercedes, dos mujeres que hablan en voz alta de sus miedos, de sus deseos, de sus realidades. Cuando se lo pasé a mis compañeras, Viky y Belén, para que lo leyesen coincidieron conmigo en que era un texto precioso, lleno de sensibilidad y poesía. Al tratar el tema de la violencia de género, uno tiene miedo de que caiga en la sensiblería fácil, el recurso de lo explícito. Pero Gracia huye de esa sensiblería para crear dos mujeres que intentan decirse y decirnos las frases que aprendieron a callar.
Nos apetecía mucho hacer un drama, pero sin jugar con la morbosidad del tema. Y “Como si fuera esta noche” lo consigue. Como público, al finalizar la obra no sales con mal cuerpo. Evidentemente sales emocionado por la historia, pero ves un punto de esperanza. No es una historia de heroínas, porque desgraciadamente, en los casos de violencia no las hay. Nosotros hemos apostado por estos personajes que nos hablan de sus vidas, y dejan en manos del público elegir entre la palabra y el silencio, es el público quién debe hacer el ejercicio de reclamar el derecho a hablar o a permanecer callado. Es un texto bello y comprometido.
“Como si fuera esta noche” se ha convertido para nosotros en un proyecto muy querido, una experiencia atractiva, bella e interesante para nuestros ojos y los del público.. Durante meses hemos intentado trazar, esbozar, dibujar y finalmente enmarcar una historia de amor entre madre e hija. Nuestra intención es trasladar al patio de butacas una historia particular de un pasado y un presente. Creo que con su poética consigue mostrarnos un universo ético, contando lo que cuenta. No pretendemos ni adoctrinar ni establecer cánones morales. Tampoco es el objetivo del texto. Como digo, eso cae en manos del público, que es el que luego debe hacer el trabajo de reflexión.
¿Por qué un drama?
Desde siempre, los miembros de A.T.A.R. (Associació teatral amateur Rondalliures) hemos tenido muy claro que trabajamos para el público. Pensamos que el teatro sólo tiene sentido si se hace para la gente, pues sin espectadores no tiene sentido. Y sabemos que en general, lo que atrae al público es la comedia, género que hemos trabajado en otras ocasiones. Pero también pensamos que a veces la mejor forma de ser útil al público es desafiarlo, ofrecerles lo que no busca. Hay personas que cuando les decimos que estamos preparando un drama nos cambia la cara. La gente quiere divertirse. Pero creemos que un texto con las características de “Como si fuera esta noche” debe ser aprovechado y disfrutado por el público. Pensamos que todo el trabajo de estos meses culminará con ese milagroso encuentro entre las dos actrices y el público. Pensamos que es un texto necesario para estos tiempos.
Jorge Luis Borges afirmaba que “existen personajes de los que no sabemos nada, pero que cobran vida en una sola frase y, tal vez, a partir de ese momento conocemos todo sobre ellos”. Desde la primera lectura, Mercedes y Clara tomaron vida, desde su singularidad, sus conflictos y sus relaciones. Y hemos intentado que sea esta palabra, las frases de los personajes, los que tomen fuerza, desde una escenografía sencilla, una iluminación especial y la presencia de la canción “Bésame mucho” de la que toma nombre la obra. Tiene una peculiaridad especial, y es que se trata de un doble monólogo que se mezcla, convirtiéndose en un diálogo. Sobre el escenario los personajes nos muestran , sin retóricas, la oquedad de sus corazones; el amor perdido, el amor no dado, la desolación de esas noches que terminan en gritos. Y encuentran en el escenario, precisamente, la oportunidad simbólica de ver restituido su derecho a decir, su derecho a ser, su derecho a construir.
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